DOMINGO

Moralmente derrotados

    Innegable la ingenuidad de quienes exigieron autocrítica en el Informe Presidencial. El primero, en los tiempos tradicionales, el tercero, en los tiempos de la cuarta transformación, la cual, por lo visto, no solo tiene sus propios datos, sino sus propias cronologías.

   Aunque fue conciliador en la mayoría de su texto, el Presidente Andrés Manuel López Obrador, al final retomó el tono desafiante, adecuado para un Presidente en campaña, como lo ha sido durante más de un año.

   Si uno repasa, no tanto las mañaneras, sino sus discursos de los fines de semana, se pueden encontrar indicios de que ya empezó a impacientarse porque el ritmo del gobierno no es el que quisiera, ya también se impacienta con la crítica y los críticos.

   Por eso cerró su discurso de ayer con el mensaje de que sus adversarios, “los conservadores y reaccionarios” están moralmente derrotados, por eso no pueden hacer nada contra él.

   El tiempo, implacable y feroz juez, decidirá no sólo el futuro de su gobierno, también el futuro de 125 millones de mexicanos, de cuyo bienestar es, moral y políticamente responsable.