DOMINGO
Fomentar la división
Cada día que pasa el ambiente social parece contaminarse más por las peores pasiones: el odio, el rencor, la maledicencia y las desbordadas ambiciones de tantos grupos de la sociedad.
Aunque comprensible que desde hace mucho tiempo el eje de la narrativa del Presidente Andrés Manuel López Obrador gira en torno a “ellos y nosotros”. Cotidianamente, desde que iniciaron sus conferencias mañaneras el lenguaje presidencial habla de la confrontación con los neoliberales y conservadores como el leit motiv de su doctrina social, política y económica.
Ha entendido el entusiasmo de muchos porque, a pesar de sus descalificaciones, no sólo a sus partidarios les preocupan los históricos lastres de la desigualdad y pobreza.
El problema con su rijosa táctica es que todo su discurso tiene el propósito de dividir a la Nación entre quienes están conmigo o quienes están contra mí.
Esa polarización, ha hecho aflorar a muchos extremistas en nuestra sociedad, tanto extremistas de izquierda, como extremistas de la derecha.
Si alguien conoce a la sociedad mexicana es el Presidente, por eso sorprende que se deje llevar por sus resentimientos y rencores y cultive a los radicales de su movimiento.
El tiempo dirá el resultado de tal acción.