Cambio de Guardia
No hay voces críticas
Faltan 95 días del final del sexenio, el reacomodo de las fuerzas económicas, sociales y políticas es más que evidente. Ya poca atención se le presta al Presidente saliente y toda se concentra en el Electo.
Como ocurre desde que quien esto escribe tiene memoria, todas esas fuerzas políticas, sociales y económicas buscan acercamientos con el Presidente Electo o cual sus colaboradores. Y en el caso actual con los miembros designados para el gabinete.
Tampoco sorprende que tantos en los medios de comunicación empiecen a matizar sus posiciones abiertamente críticas a Andrés Manuel López Obrador. Unos con elegancia, otros burdamente, cada quien su estilo, pero para muchos es trascendente recibir el calor del Sol naciente.
Sorprende que tantos hayan asumido posiciones acríticas del quienes encabezarán el próximo gobierno. La mejor prueba es que en las conferencias de prensa, hay que reconocerlo, ya no se hacen preguntas incómodas, como si temieran incomodar al miembro del siguiente gobierno.
Esa actitud poco ayuda el próximo Presidente de México y su gobierno, poco le ayuda porque cuando no se abren espacios para voces disidentes, hasta ellos salen perjudicados, porque entonces no tendrá un entorno de colaboradores, sino un grupo de cortesanos que aplaudirán todo y lo que sea.
No se trata de emular a quienes por lo que sea se lanzan a la yugular del Presidente Peña Nieto, me refiero a los entusiastas miembros de la cofradía “Peña no sabe nadar”, a quienes nada les parece.
A pesar de su abrumador respaldo en las urnas, o quizá, precisamente por eso, está el Presidente Electo Andrés Manuel López Obrador para escuchar las voces críticas, porque en el entorno que se está creando, no las escuchará y, como otros antes que él, su primer círculo lo aislará irremediablemente, y muy tarde se dará cuenta que todo lo que hagan sus colaboradores, al final del sexenio se le carga a la cuenta del Presidente, aunque nada haya tenido que ver.