Comentario con López-Dóriga
Necesarias negociaciones confidenciales
Al anunciar negociaciones con varios grupos armados, la Secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero desató una escandalera. Empeoró cuando los gobernadores de Tamaulipas y Michoacán criticaron al subsecretario Ricardo Peralta por reunirse con grupos que, según los mandatarios estatales, no son autodefensas, sino delincuentes.
Esta mañana, el Presidente López Obrador reveló que se decidió que el subsecretario sólo debe respetar la Constitución, aunque rechazó negociar con bandas criminales.
No sabemos si fue un intento de probar nuevas fórmulas para reducir la violencia o si en Gobernación tomaron la iniciativa.
Este lance, Joaquín, es una lección para el gobierno del Presidente López Obrador: muchos asuntos de Estado, por su trascendencia, deben manejarse con sigilo y al diablo con la transparencia.