Comentario con López-Dóriga

Vías institucionales

   Se alarga el debate por los niveles salariales de los servidores públicos, atizado por la narrativa de los ganadores de las elecciones del pasado uno de julio.

   Las opiniones están divididas. No creo que por estar en el servicio público una persona deba vivir con la estrechez del mítico Gutierritos de la telenovela, pero también creo que los salarios en el servicio público deben ser suficientes para retener a los capaces, sin rebasar las realidades de un presupuesto que nunca alcanza.

   Como sea, Joaquín, la oposición en el Congreso juntó suficientes legisladores para impugnar la inconstitucionalidad de la ley de remuneraciones salariales. Si la impugnación de los legisladores avanza en la Suprema Corte, los ministros podrían suspender la aplicación de la ley, en tanto se da el fallo definitivo. Afectaría, sin duda, el presupuesto que el gobierno debe presentar al Congreso la próxima semana.

   Veremos que sucede, Joaquín, pero es reconfortante que las rencillas políticas – y esta es una rencilla política-, se puedan resolver por las vías institucionales, lo cual, digan lo que digan, habla muy bien de nuestro democrático entramado institucional.