Comentario con López-Dóriga
Poner las barbas a remojar
No sorprende que la crisis por falta de agua potable en Monterrey, acá en el Altiplano no se aprecia en toda su gravedad en la ciudad que es potencia económica en la República.
Por lo leído, Gregorio, esta crisis por falta de agua se vio venir en tiempos de Alfonso Martínez Domínguez, hace cuarenta años.
Han sobrado proyectos, casi todos pospuestos por distintas razones, casi siempre políticas.
Esa es la lección para las sociedades de las ciudades a las que más temprano que tarde les faltará el agua, que hay problemas que exigen a las sociedades involucrarse en exigir soluciones, que los políticos sepan que les saldrá muy caro darle prioridad a sus grillas, antes que a las necesidades de los gobernados.