Comentario con López-Dóriga

Circunstancias no previstas

  Hoy se cumplen 58 años del asesinato de John F. Kennedy. Aquella visita a Texas en noviembre de 1963, eran los preámbulos de su campaña por la reelección en la elección presidencial de 1964.

  Para las nuevas generaciones, como dice el clásico de Palacio Nacional, el asesinato fue un año después de la histórica crisis de los misiles en Cuba, cuando el acuerdo de Kennedy con el Kremlin en octubre de 1963 evitó el estallido de una apocalíptica guerra nuclear.

  La reflexión hoy debe ser como circunstancias no previstas trastornan los mejores proyectos políticos y, como con el asesinato de Kennedy, cambian el curso de las vidas personales y hasta la historia de una Nación.