Comentario con López-Dóriga
No canten victoria
Ayer en este tu espacio, Joaquín, se dijo que la salida de Alfonso Romo podía ser vista como un triunfo de los duros ideólogos de la Cuarta Transformación.
Hoy confirma Romo tal apreciación al insistir en que para atraer la inversión privada hay que hacer a un lado las ideologías, propuesta que, si la hizo en Palacio Nacional, seguro incomodó a los duros que nunca lo consideraron como uno de ellos, los puros de la 4T.
Sin duda, Joaquín, que eso envalentonará a los duros, aquellos que se empeñan en imponerle su agenda ideológica al Presidente.
Ese es su error, porque el Presidente López Obrador tiene defectos, pero entre ellos no está el de ser dejado.